diciembre 05, 2019 3 Tiempo de lectura

Esta época llena de compromisos, fiestas y eventos, no dejes de lado las tradiciones que tu familia ha preservado por años. Tus hijos aprenden mucho de ellas y los ayudan a formarse como personas, sigue leyendo para que te contemos más.

Lo que hacemos como familia es mucho más importante de lo que crees, está comprobado que un ambiente feliz en familia reduce el riesgo de sufrir un infarto y te hace vivir más años.

Meg Cox es la autora del libro The Book of New Family Traditions y ella define a una tradición como “cualquier actividad que repites intencionalmente como una familia, que requiere una mayor atención y se eleva por encima de las actividades rutinarias”. O sea que no importa lo pequeño de la acción si se juntan y toman tiempo para hacerla es una tradición. Esto puede incluir algo tan sencillo como bañar al perro juntos cada dos domingos hasta una actividad más íntima como poner el árbol de Navidad o que madre e hijo partan los turrones antes de servirlos. 

 Y estas tradiciones le dan a nuestra familia numerosos beneficios:

 Conectan generaciones

Las tradiciones son una gran manera de mantener vivo el recuerdo de nuestros familiares y acercar a los más grandes con los más chicos. Son una excelente manera de que los abuelos y bisabuelos les pasen conocimiento a los más chicos y se cultive su participación. La Universidad de Oxford realizó un estudio en el que analizó la importancia de los abuelos en el crecimiento de los niños. Los resultados demostraron que los niños que tienen una relación más cercana con sus abuelos tienen menos problemas de conducta y emocionales.  ¿Los abuelos vienen de visita cada día festivo especial? Eso es una tradición.

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Herencia cultural y religiosa

Compartir una tradición que gire alrededor de una festividad religiosa o cultural (como miércoles de ceniza, Yom Terúah o el Día de Muertos) es una gran forma de enseñarles acerca de tu familia su historia y de dónde viene. Puedes mantener vivas generaciones por mucho tiempo y hacer que tu hijo aprenda sobre su historia familiar.

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Dan un sentido de identidad

Las tradiciones que formamos con nuestras familias y las que nos enseñan nuestros padres se vuelven parte de nuestra identidad. Nos enseñan sobre nuestro pasado y nos ayudan a formar nuestro propio futuro. Ya sea una tradición mexicana como festejar el 16 de septiembre con una cena, hasta ir de vacaciones al mismo lugar todos los años. Cada acción y cómo la viven los niños es responsable de forjar su personalidad. Hay estudiosque afirman que los niños que tienen un conocimiento íntimo y cercano a su historia familiar generalmente se adaptan mejor y tienen más seguridad en sí mismos que niños que no. Ser parte de algo más grande, que es fuerte y amoroso como una familia, les da más confianza.

 

 

Fortalecen el lazo familiar

Las familias con tradiciones tienen una conexión emocional más fuerte que las que no tienen ningún ritual. Las tradiciones dan la oportunidad de fomentar la convivencia cara a cara, fortalecer la confianza de unos con otros y de conocerse más profundamente para crear un lazo más fuerte y duradero.

 

 

  Les dan un sentido de ritmo

Todo en la vida de una persona se conforma de ciclos y etapas: verano e invierno, amanecer y atardecer, nacimiento y muerte. Tener tradiciones va de la mano con el movimiento cíclico de la vida. Sentir que vas a un ritmo constante y medible te da estabilidad como persona. Las tradiciones son una excelente manera de darle a nuestros hijos algo por lo que emocionarse en el futuro y algo que recordar con satisfacción del pasado.

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 ¿Cuántas tradiciones familiares recuerdas y has pasado a tus hijos? Así como forman parte de tu historia, las tradiciones que practican hoy van a ser parte de la vida de tu hijo para siempre. En Tubbies nos encanta que el lazo familiar sea fuerte y sólido y estas épocas son perfectas para cultivarlo.


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