Una sonrisa en cada baño

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agosto 01, 2017 3 Tiempo de lectura

¡Por fin! Estamos disfrutando en familia de unas deliciosas y merecidas vacaciones, y, de repente nuestro pequeño se expuso de más al sol, le duele la pancita o tiene una tos que no lo deja dormir. Así que si queremos que las vacaciones sigan viento en popa y observamos que no es nada grave, sólo hay una cosa por hacer hacer: recurrir a los tips de la abuela.

Algunas veces (por no decir muchas) son muy oportunos los consejos sobre utilizar cosas naturales para prevenir o aliviar algunos síntomas en los niños, principalmente cuando estamos lejos de casa. Estos son los que a mí me han funcionado, por ser sencillos y fáciles de conseguir.

1. Alivia las quemaduras de sol

Cuando los niños juegan de más bajo los rayos del sol, báñalos y unta gel de sábila por las noches; ayudará a regenerar la piel. En caso de que no tengas esta planta a la mano, coloca compresas de leche fría en las zonas afectadas.


2. Reduce la indigestión y la diarrea

Siempre hay que llevar en la bolsa algunos sobres de té de manzanilla; te aseguro que te sacará de cualquier apuro, sobre todo cuando se trata de problemas gastrointestinales.

Si a los chiquitines les cayó mal un alimento y les duele su pancita, lo mejor es darle a beber este té, gracias a que previene la inflamación y relaja todo su tracto digestivo.

Otro consejo natural de la abuela es hacer una limonada alcalina, sólo hay que mezclar agua, jugo de un limón, una cucharada de bicarbonato (que tampoco debe faltar en la bolsa), una cucharadita de azúcar y una pizca de sal.

3. Dile adiós a las rozaduras

La mejor arma contra la humedad en la piel es la fécula de maíz natural, incluso mejor que el talco, porque la absorbe por completo. Además ayuda a reducir la comezón y las erupciones en la piel.

4. Cuida las picaduras

Al aloe vera es una planta favorita de las abuelas porque se puede utilizar para aliviar diferentes cosas como las molestias ocasionadas por picaduras de insectos (en niños y adultos), sólo tienes que aplicar en la zona afectada.

Pero, si a tu hijo le picó una abeja, lo ideal es que saques el aguijón y coloques hielo para reducir la inflamación. También puedes mezclar bicarbonato de sodio en agua y colocarlo como compresa.

5. Dale batalla al estreñimiento

Así como a los adultos nos afecta los cambios de altitud y de alimentación, a los niños también, por lo que es normal que a veces se presente el estreñimiento.

Para prevenirlo o aliviarlo sólo tenemos que dar un masaje de vientre a nuestros hijos; hazlo realizando movimientos circulares en el sentido de las manecillas del reloj (también se usa para aliviar el dolor de panza)

No olvides darle en la mañana un vaso de jugo de naranja para que su intestino funcione mejor.

6. Que no te sorprenda la fiebre

Lo ideal en estos casos es bañar al pequeño con agua tibia o aplicar compresas de agua fría en la frente, la parte de atrás del cuello y en las muñecas.


7. Bye, bye alergias

La manzanilla es tu gran aliada por ser un antihistamínico natural. Remoja las bolsitas de té en agua, escúrrelas y aplícalas sobre los ojos.

8. Calma la tos o irritación de garganta

Sin duda alguna, la miel es uno de los mejores remedios para acabar con este síntoma. Sólo dale a tu hijo dos cucharaditas de miel (puedes agregar unas gotas de limón) y se olvidará de las molestias. Puedes complementar con un trapo caliente en la garganta por las noches.

Si no le gusta la miel, sólo agrégala a un vaso de leche tibia y no notará el sabor.

Estos tips de la abuela son ideales para una emergencia, pero si notas que no ceden los síntomas, lo mejor es buscar un médico para que revise a tu pequeño, así tus días de descanso en familia serán lo que esperabas y no se convertirán en una pesadilla. ¡Disfruta tus vacaciones al natural!

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