Llegaron las vacaciones de verano y nuestros hijos seguramente ya esperan con ansia el viaje a la playa, los paseos en el parque, jugar en el patio horas y horas… Tan sólo pensarlo ya nos sentimos agotadas (jajaja). Pero, hay algo que no debemos olvidar para que todo sea diversión: proteger a los peques de los rayos del sol.
Aunque pareciera que esté nublado o que sólo hace calor, los rayos solares son más fuertes en verano que en cualquier otra época del año. Así que si vas exponer a los peques al sol, te recomiendo estos sencillos tips de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) para proteger la piel de los pequeñines:
1. Aplícales bloqueador
Parece algo trillado, pero es real. Los pequeños no deben salir a la calle sin un producto adecuado que les proteja la piel y reduzca la probabilidad de que sufran alguna quemadura solar, por muy pequeña que sea.
Los dermatólogos del CDC recomiendan los protectores que tengan un
Factor de Protección Solar de 50 de espectro amplio. Lo mejor es aplicarlo en todo el cuerpo (incluyendo rostro, orejas, manos y pies) 30 minutos antes de salir al aire libre.
Es importante volverlo aplicar dos horas después de la exposición o después de nadar o sudar.
OJO, si tu hijo tiene menos de seis meses, mejor pregúntale a su pediatra la mejor forma de protegerlo, ya que no se recomienda el uso de este tipo de productos en su piel, por ser más delgada y en proceso de desarrollo.
2. Busca la sombra.
Los rayos del sol son más fuertes durante el mediodía, así que si piensas salir de casa con tus hijos, lo mejor es hacerlo después de esta hora; mientras buscar actividades en el interior.
En caso de que los pequeños ya estén desesperados por irse, jueguen bajo la sombra de un árbol o utilicen un paraguas para cubrirse del sol.
3. Vístelos con ropa adecuada
Lo ideal son las camisas o playeras ligeras de manga larga y las faldas o los pantalones largos, porque así reduces los daños de los rayos UV. Incluso, pueden ser de color oscuro; aunque no lo creas, éstos ofrecen una mayor protección que los claros.
4. Ponles sombreros
Les protegerá la piel del rostro, del cuero cabelludo, orejas y cuello. Deben ser de ala ancha, un ejemplo son los tipo panameño, pescador o de paja. Las gorras no son una buena opción porque quedan desprotegidos el cuello y las orejas.
5. Dales unos lentes de sol
Este tips es más efectivo si vas a la playa, ya que les ayudará a proteger sus ojos del reflejo del sol en la arena, mar o del agua de la alberca.
Cuando se exponen demasiado los peques al sol, notarás que su piel tendrá un aspecto rosa o bronceada, así que es momento de buscar una actividad bajo la sombra.
Así que por más desesperados que estén tus hijos por salir y jugar bajo el sol, ponles bloqueador a través de juegos o actividades, si lo haces de forma divertida, poco a poco adoptarán la rutina de cuidados sin que se den cuenta.
No olvides que si cuidamos la piel de nuestros hijos desde pequeños, reduciremos hasta en un 90% el desarrollo de cáncer de piel cuando sean adultos. Por eso,
¡demuéstrales tu amor con estos pequeños cuidados, te lo agradecerán!